Como un eco de los paisajes más serenos y los sentimientos más profundos, este vestido largo captura la esencia de la feminidad atemporal. Sin mangas, deja que la piel respire y se funda con el entorno, mientras que el resorte en la espalda se adapta sutilmente, delineando un contorno que se mueve al compás del corazón.
Se viste para ocasiones donde las almas se encuentran y los sueños convergen: un coctel en una terraza iluminada por la luna, una ceremonia al aire libre bañada por el sol, o una galería de arte donde las miradas dicen más que mil palabras. Con este vestido, cada paso es un suspiro, una promesa de belleza que perdura
Tela:
Popelina
Composición:
98% Poliéster
2% Elastómero